Ni un puto latido II

Bombón

Soy un bombón

de chocolate

de esos que exhiben los escaparates

del centro con descaro

envueltos en papel de arroz

de los que se derriten en los dedos

y se deshacen en los labios.

Sin albur

Un día de estos
te invito a no dormir juntos
a desvelarnos
a platicar mientras la lluvia cae
mientras la luna nos ve
sin emitir juicios
hablar sin verdades absolutas
sin vanguardias, canones o credos
hablar por el gozo de hacerlo
mientras otros duermen
o quizás hasta sueñan.

Lágrimas de otoño

Estoy tan triste

que lloro los ojos

caen en forma de cristales ocres

caen en tropel y se deslizan por mis labios

los siento salados, duritos, concentrados.

Lloro lo ojos

y ya no veo nada

y ya no siento nada.

Desvestirse

Me saco la blusa sin desabotonarla

un botón se queda atorado en la melena

allí estoy

frente al espejo de cuerpo entero

la blusa ahora es un turbante

mi piel contrasta con el negro del sostén

bajo la cremallera

la falda se desliza hasta los pies

botas altas

a la rodilla

recuerdo y sonrío

me siento sexy

vuelvo a sonreír

mi vientre aún es plano

recuerdo a la Sabina de Kundera

y pienso que a mi atuendo

le falta un sombrero

indiscutiblemente de hongo

un paso atrás

otro a la derecha

fuera del alcance del espejo

termino de desvestirme

sin luz y en silencio

al cabo de unos segundos:

desnuda

Malita

Hoy me siento mala

no mal

sino mala, malita

tremendamente mala

cero bondadosa

ni una pizca de bondad

amaneció en mi sangre

se siente rico

hoy no tengo dulzura

no tengo comprensión

ni ganas de consentir

sino todo lo contrario

guiño de ojo

sonrisita a medias

pierna cruzada en el bar

sombra negra

cubriendo las venitas de mis párpados

una copa de tinto mojando mis labios

mala, malita

a cada sorbo

Una educación romántica

Ocho horas por semana

con la señora Julia

que de eso sabía mucho

de eso y nada más

la recuerdo con su pañuelito bordado

y las tacitas de te

romántica y delicada

sufridita diría yo

entre más pálida mejor

es bueno verse como si una estuviera a punto de demayarse

en peligro

dispuesta a caer los brazos de un caballero

o de cualquiera

pero con gracia

medio bobita

sin pasarse de la raya

hay que parecerlo no serlo

ese es el secreto

se me olvidaba

repetir cincuenta veces

a modo de letanía

sin ti me muero

sin ti no puedo

sin ti no sé que haría

tu eres mi corazón

tu eres el único

tu eres, tu eres

con ritmo y elegancia

vestida de encaje, collar de perlas

y medias blancas.

Memorias de una chica católica

Cómo nos divertíamos...

entre rezos y confesiones

Bajito

Me gusta decir las cosas en voz baja

al oído

cerca

con complicidad

nunca subo el tono

me parece burdo

y querer llamar la atención

de todos

y yo quiero la de muy pocos

pero la quiero toda

por eso me acerco

y lo digo bajito.

óyelo.