Existe una Torre de Espantaperros en Badajoz que servía de atalaya para avisar las incursiones del enemigo o bien para infundir un sentimiento de protección a los pobladores, también hay un pequeño bar en Ávila donde en una noche de verano tuve una epifanía (después de dos tintos, poco neceisto). Fue así como surgió la idea de crear una editorial y llamarala "Espantaperros". La criatura que ha pasado ya un par de años enquistada. Tal vez este 2008 tenga las condiciones propicias que la hagan despertar, aún no lo sé.
Al parecer la Torre de Espantaperros estuvo en la ruta de aquel caballero de la triste figura...cuyas hazañas han trascendido siglos, no tomé el nombre de allí sino del pequeño bar que esta en Ávila pero también tiene que ver de alguna forma con aquella cita que se le achaca al hidalgo de "Dejad que los perros ladren porque es señal de que vamos cabalgando (avanzando)"
Me gusta pensar que la dosis de locura es indispensable para vencer obstáculos: gigantes, enanos, cuestiones de dinero, salud, temores etc y que así como dice Alan montarse al tractor esquivar los machetazos o bien como dice Julito ser un engranaje de la maquinaria.
En fin espantperros puede que este despertando de su letargo...
2 comentarios:
Ojalá que se haga realidad pronto! Desde ya esperamos tan interesante proyecto, y que tanta falta hace! Saludos Lorena!
Me gustó mucho la cita del Hidalgo. Esperemos que despierte con furia, eh.
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