La Higuera 2004

Llevo varios días internada en mis libros, archivos, y fotografías. Días duros de mucho trajín y recuerdos. Entre ellos encontré fotos y el "discurso" que dio Eduardo Estevéz, poeta argentino gallego la noche que presentó mi libro desconocido La Higuera, algunos de los cuentos fueron incluídos en Desnudo Resposo pero los dos más importantes el que lleva el mismo título del libro y el ganador del premio que me permitió publicar 50 copias jamás han vuelto a salir a luz. Según yo sin un motivo aparente.

Les comparto secciones del prólogo por Iratxe Retolaza filóloga vasca y Doctora en Literatura Comparada de la Universidad de Santiago de Compostela, si encuentro más adelante incluiré un poquito de lo dicho aquella noche y algunas fotos.

Las Semillas de la higuera: una mano, un lápiz y un papel

Un papel en blanco nos aterroriza. Su silencio nos perturba, la soledad nos invade, la incomunicación cobra cuerpo. Ese temor nos desborda sin límites cuando es nuestra mente la que se transforma en ese único y continuo papel en blanco. Es en esa aterradora situación cuando el ser humano lucha por dar sentido a ese espacio vacío: intenta garabatear siluetas, diluirse en colores...aún conscientes de la imposibilidad de una comunicación real... no cesamos en esa búsqueda de comprensión, de comunicación. En definitiva, no cesamos de buscar compañía. En esta colección de relatos, La higuera, esa búsqueda se concretiza en una armónica danza de una mano, un lápiz y un papel. Las tres grandes semilla de esta inalcanzable "higuera".

Agudeza y honestidad, una mezcla muy apropiada para hacer frente a temores y frustraciones, para huir de la desesperación... Los frutos de esta higuera ono nos proporcionana respuestas, no nos adormece con equilibrio y tranquilidad, por el contrario, nos bombardea con preguntas inquietudes sin, resolver, dolores sin consuelo.

Los personajes se moverán por ansia de comprensión. Esta ansia aveces se caracterizará por una sutil ironía, y otras veces se nos mostrará con una descarnada crudeza, pero siempre con una sinceridad y cercanía embaucadora.

Estos atisbos de discurso metnarrativo nos esbozan las primeras línea de la autopoética de la escritora Lorena Flores: "te confieso que escribo por el placer que me da plasmar en letras lo que constantemente gira en mi cabeza y que por ratos me atormenta y me desvela". La escritura como confesión, como liberación, y sobre todo como placer.

En conclusión, las diversas narradoras gritan y se lamentan, rompen con todo silencio, intentando ocupar un vació. Pero sobre todo nos invitan a que carguemos de sentido todas las indeterminaciones y vacíos de estos relatos.

Lugar Casa a Das Crechas, Santiago de Compostela...21 de junio a las 21:00